Perestroika: De la caída Soviética a la de Washington – 1989-2020

Wim Dierckxsens, Walter Formento

https://www.aporrea.org/internacionales/a283534.html

Encontré esta larga nota y creo que hay que leerla porque es un desarrollo muy completo con una estructura cronológica que se remonta al Imperio Romano para intentar encontrar aspectos comunes en evolución, decadencia y caída de proyectos geopolíticos hegemónicos en el mundo.

Hablando de la Prestroika, escriben los autores: “A lo largo de la historia, el colapso de las grandes potencias de cada época coincidía justo, en un tiempo histórico donde creían que eran invencibles, lo creían justo antes de su desastrosa caída que denominan Reestructuración (Perestroika) integral sistémica.

Sin pretender hacer un análisis histórico aquí, lo cual hicimos ya (Dierckxsens 1982), esto lo hemos visto ya en la Antigüedad con el Imperio Romano, lo vimos con la descomposición de la Unión Soviética hace treinta años y lo vemos hoy en Estados Unidos. Observamos, que rara vez se percibe el borde del acantilado, o incluso el fondo del abismo, antes de que éste se haya tragado un imperio entero y, aun así, tampoco lo ven hoy.”

En este contexto, analizan a la Unión Soviética y a los EEUUU como los ejes del “bipolarismo este-oeste resultante de la segunda guerra mundial (1929-1944).”

Para nuestra actualidad, lo importante es que “Con la crisis financiera de 2001-2008, que manifiesta el inicio de la Caída del Unipolarismo Continentalista de EEUU, entramos claramente en la etapa de la caída del último actor del bipolarismo.”

Esto ya lo he leído antes, y no es tan sencillo convencerse de que va a suceder, y, mucho menos, si es algo próximo o futuro o muy futuro. Hay demasiados factores de poder que van a intentar que este capitalismo neoliberal (¿es realmente capitalismo?) se mantenga.

Por ejemplo, veamos este título: Mientras crece la desigualdad, la fortuna de los superricos de la Argentina y la región aumentó durante la pandemia (https://www.redaccion.com.ar/mientras-crece-la-desigualdad-la-fortuna-de-los-superricos-de-la-argentina-y-la-region-aumento-durante-la-pandemia/).

Pensar que toda esta gente que gana tanto dinero con la devastación del ambiente y la miseria de la mayoría de los hombres y mujeres del mundo va a ceder fácilmente a que caiga el poder de EEUU, sería de una ingenuidad total.

Es cierto que hay aspectos globales que están en una fase crítica, y que están empujando a reacciones sociales que podrían ser de una fuerza y violencia no conocidas por nosotros/as.

Para los autores, la situación es la siguiente: “Desde antes del triunfo en las elecciones de Trump de noviembre de 2017, hemos señalado que Estados Unidos está en medio de una gran crisis estructural, interna entre las fuerzas globalistas, continentalistas y Trump expresando un nacionalismo de país central que es principalmente anti-imperio globalista. Ya hemos señalado, en otros artículos, que esta crisis interna, luego de la “Batalla de Alepo” donde se derrota militarmente a las fuerzas de la OTAN en Siria, ya no puede exportarse hacia otras naciones (Ej.: India, Rusia y China) y por lo tanto solo puede profundizarse dentro de los Estados Unidos.

Por lo que significaría, a la vez, el fin del Imperialismo unipolar norteamericano –que denominamos: Washington- y, probablemente, el fin de la civilización imperialista anglo-occidental. Esta afirmación es tan profunda y fuerte para el bloque occidental capitalista, como lo fue la perestroika y la desintegración de la URSS hace 30 años para el bloque oriental. Porque las consecuencias para los Estados Unidos y el “Occidente angloamericano” serán tan profundas, como lo fueron para el Imperio Romano en la Antigüedad y para la URSS en los tiempos de la modernidad. La Perestroika de “Washington” es el último hecho de la modernidad.

Esta imposibilidad de trasladar los gastos militares a otras naciones es la clave de la posible “caída del Unipolarismo Continentalista de EEUU.””

Analicemos lo que fue la Perestroika:

“Hace 25 años (Dierckxsens 1994[iii]) ya habíamos anticipado “La Perestroika en Occidente” y sobre la base de la Economía Política. En nuestro libro “Las Relaciones Sur-Sur y el desafío de un nuevo proyecto de civilización” (2017) hicimos una renovada referencia a las condiciones ya dadas para una Perestroika en Occidente, necesidad que tiene que ver con el gasto militar insoportable y ya no transferible a otras naciones u otros pueblos como fue el caso del Imperio Romano, de la Unión Soviética en los ochenta y de EEUU hoy. Los fundamentos de la economía política que tantas veces aciertan, también nos dan la razón hoy. Queremos retomar y proyectar este análisis a la crisis de EEUU como Imperialismo y de la civilización occidental anglosajona hoy.”

Por todo esto, me pareció una nota de imprescindible lectura para los/las que queremos entender el mundo en que vivimos para tomar mejores decisiones.

Es cierto que esto parece una misión difícil en Argentina donde los manifestantes anti cuarentena gritan que la pandemia y la vacunación son una estrategia de los “amos del mundo que quieren que seamos zombies” (lo escuché, no invento), y otras barbaridades de los libertarios y terraplanistas, que atacan (no casualmente) al Estado y a toda intervención contra la libertad de mercado y otras libertades. Sin embargo, hay que intentarlo, porque me preocupan no los individuos que se visten de cuernos y pieles, sino que haya una buena cantidad de jóvenes que están adhiriendo a esta posición extrema.

Esta nota es anterior a las elecciones en EEUU, y hace una serie de consideraciones sobre un mundo con Trump y sin Trump. De hecho, uno podría preocuparse más por lo que sucedería si Trump perdiera las elecciones –como ocurrió- que si las ganara.

“En síntesis, la crisis interna de EEUU está llegando a su clímax, con mucha corrupción y ninguna transparencia. El año 2020 podría tomar forma hasta de guerra civil más que de campaña electoral. Si gana Trump, o no, de todos modos, el panorama para el año 2020 es de una gran crisis económica en el país y a nivel mundial. Queda clara la necesidad de otro sistema monetario internacional donde EEUU como nación ya deje de ser el centro.

Si los globalistas ganan, lo más seguro es un fraccionamiento del mundo en dos sistemas monetarios internacionales en pugna y muy probablemente el fraccionamiento de EEUU en diferentes economías regionales-locales. Si Trump logra un segundo período, lo más probable es una derrota tanto de los globalistas así como de los continentalistas y la posibilidad real de la construcción de un mundo multipolar sin nuevo imperio. Ambas alternativas tienen en común una Perestroika para EEUU.”

Esta es la conclusión de la nota, y es muy terminante, por eso destaco la oración final.

Si sucede así, nos encontraremos frente a un marco internacional muy complicado, y, para nuestra difícil situación económica y social, significarán nuevas situaciones complejas para solucionar. Sería muy importante que los países de América Latina avanzaran en alguna integración que nos permitiera tener mejores posibilidades de acción en este contexto global. Lamentablemente, hemos retrocedido. Se ha atacado al MERCOSUR, y Macri tuvo una acción destacada en esta penosa acción.

Los autores analizan las opciones de “los globalistas así como de los continentalistas”, pero desconocemos cómo se concretarán las futuras acciones de los poderes centrales, y su reacomodación después de la pandemia.

ESPEREMOS, PERO NO DEJEMOS DE TRABAJAR POR UNA ARGENTINA QUE SUPERE ESTA DURA SITUACIÓN. ESTAMOS TODOS/AS EN JUEGO EN ESTO.