3 Comments

1. 

   Humberto Podetti on 29 noviembre, 2015 at 8:53 am

   La ciencia y la tecnología son herramientas imprescindibles para que América del Sur se convierta en un continente industrial en el Siglo XXI. "Industrial" no significa la industria textil mexicana -por ejemplo- cuyo conocimiento agregado es menor que la producción de alimentos por un chacarero del sur de Santa Fe- sino el desarrollo de los reactores CAREM con su revolucionario núcleo enfriado por el propio reactor, la genética de semillas y animales, la robótica, el automóvil eléctrico, la comunicación satelital, etc. Cada uno de estos desarrollos científicos tiene en Argentina -también en Brasil- desarrollo suficiente como para ser excelentes oportunidades de negocio. Tal vez esto garantice la permanencia de Barañao y de las políticas científicas que ha desarrollado. También porque es un hombre muy respetado en Brasil y en toda América latina.

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2. 

   Adolfo Ariza on 2 diciembre, 2015 at 8:24 pm

   Nos encontramos frente a dos decisiones tomadas ante la alternativa de continuar en un cargo y acompañar a la gestión del Gobierno de Macri.
   Lino Barañao aceptó continuar como Ministro de Ciencia y Tecnología, con el acuerdo de la Presidente que, según lo que él mismo declara, le dijo que” la condición es que pueda elegir a la gente y que me garanticen el presupuesto para llevar adelante los proyectos" y agregó: "Sentí la obligación ética de salvaguardar algo que es un bien de toda la sociedad”.
   En cambio, el presidente del CONICET, Roberto Salvarezza, renunció “porque no están garantizadas las políticas científicas". Las razones que expone en la nota que le hace Tiempo Argentino (http://tiempo.infonews.com/nota/197437/renuncio-porque-no-estan-garantizadas-las-politicas-cientificas), son una excelente síntesis de las condiciones que deben darse para que exista una política de soberanía tecnológica. Este análisis será un buen marco para evaluar lo que suceda con el Ministerio y con la política de Ciencia y Técnica de Macri a la luz de todo lo que se hizo en Gobierno del FPV.

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3. 

   pablo sela on 3 diciembre, 2015 at 10:11 am

   En términos personales, y todavía a nivel de casi sensaciones, debo decirte que no me gustó la actitud de Barañao. He visto y escuchado que se esgrimen razones de todo tipo, a favor y en contra de su continuidad, de los sectores mas progresistas y también desde los mas reaccionarios, y aún teniendo claro que la política científico-tecnológica debe ser una cuestión de Estado, me da la impresión que proclamar la neutralidad de la ciencia si cargarle una posible respuesta desde la cosmovisión del mundo de para quienes, porque y cómo, es al menos una postura naif que no comparto…

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